La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad, que se llevó a cabo del 21 de octubre al 1 de noviembre de 2024 en la ciudad de Cali, Colombia pero que no logró concluirse con un acuerdo, volverá a reunirse del 25 al 27 de febrero de 2025 en Roma. Pero las autoridades colombianas llegarán a esta cita con malos resultados porque la deforestación reapareció como uno de sus más graves problemas ambientales.
No hace mucho, Colombia celebraba que en 2023 se había podido reducir la deforestación logrando unos resultados mínimos históricos, cerca de 79 000 hectáreas.
Pero en el 2024, la destrucción de bosques y selvas volvió a dispararse, aumentando en un 35%, el equivalente a 107 mil hectáreas destruídas. Para darse una idea, es como si la superficie de Hong Kong hubiese desaparecido de la faz de la tierra.
La deforestación es un problema que el gobierno no ha podido detener a pesar de que el presidente Gustavo Petro se presenta como uno de los mandatarios más radicales para proteger el medio ambiente.
Al Director de la ONG Acción Verde, Juan Manuel Soto, le preocupa que nadie pueda parar esta tragedia en este país, el segundo más biodiverso del mundo: "Es un desconcierto de que el Gobierno que se propuso bajar la deforestación, no ha podido hacerlo, digamos que el descontrol sobre la deforestación es escalofriante, estamos hablando de 107 mil hectáreas donde había fauna, flora, posiblemente comunidades habitando y capacidad de recarga del agua, carbono que se está liberando, es un desastre."