Laura López
Alzate
La capital
antioqueña fue el epicentro de la I Semana de la Bioeconomía
Colombiana un evento trascendental, realizado del 27 al 30 de mayo de 2025, el
cual reunió a líderes empresariales, académicos y representantes del sector
público.
Trazar una hoja de ruta
hacia un desarrollo sostenible basado en los recursos forestales y sus
servicios ecosistémicos fue uno de los objetivos de la I Semana de la
Bioeconomía Colombiana, organizada por la Federación Nacional de Industriales
de la Madera (Fedemaderas). Este evento reflexionó acerca de la importancia de
posicionar a Colombia como referente regional en bioeconomía y promover un
cambio de paradigma económico.
Durante la rueda de prensa
inaugural, Juan Miguel Vásquez Suárez, director ejecutivo nacional de
Fedemaderas, enfatizó en la urgencia de fortalecer las políticas públicas para
impulsar la bioeconomía en el país.
Vásquez señaló que la
bioeconomía no es solo una estrategia ambiental, sino una significativa
oportunidad económica que puede contribuir de manera considerable al PIB
nacional. Destacó la subutilización del 92% del bosque natural en Colombia, con
solo 279,000 hectáreas aprovechadas de los 59 millones disponibles, y la gran
aptitud de 7.5 millones de hectáreas para plantaciones forestales comerciales,
de las cuales solo se utilizan 550,000. A modo de comparación, mencionó que
Chile, un país hermano, ha desarrollado más de 2 millones de hectáreas en
cultivos forestales, contribuyendo casi a un 3% a su PIB. También recalcó la
marginalidad de Colombia en el consumo global de madera, proveyendo solo el
0.07% de los 4 mil millones de metros cúbicos que el mundo consume, y la
incapacidad del país para producir la totalidad de los 6.2 millones de metros
cúbicos que consume internamente, generando un déficit en la balanza comercial.
Carlos Jiménez Posada, ingeniero forestal, lamentó la subutilización del potencial forestal de Colombia, a pesar de tener una vocación geográfica que podría destinar 25 millones de hectáreas para este fin, con 7 millones de alta calificación. Señaló que la cifra actual de 550 mil hectáreas establecidas ha crecido de manera exigua, perdiendo oportunidades de ingresos y empleo. Insistió en la necesidad de que el sector público genere mejores condiciones jurídicas a través de políticas verdaderamente dinamizadoras que atraigan inversiones significativas e innovaciones tecnológicas.
Antioquia
comprometida con favorecer la inversión
Manuel Naranjo, secretario
de Desarrollo Económico de la Gobernación de Antioquia, resaltó el compromiso
del departamento en favorecer la inversión y el desarrollo de proyectos
productivos en el sector de la bioeconomía. Explicó que el plan de desarrollo
departamental, liderado por el actual gobernador de Antioquia, Andrés Julián
Rendón Cardona, prioriza la inversión en bienes públicos como infraestructura
vial y conectividad digital para detonar la inversión privada y la
competitividad.
Naranjo enfatizó que no
existe una disyuntiva entre ambiente y economía, sino que pueden crecer de la
mano, fomentando el desarrollo empresarial y la protección ambiental.
Identificó al sector forestal, la agroindustria, el turismo regenerativo y la
bioenergía como pilares clave para el departamento, con un gran potencial de
crecimiento del PIB. Mencionó iniciativas como un fondo de ciencia, tecnología,
innovación y emprendimiento para el sector agroalimentario, y la posible
creación de un certificado de incentivo forestal (CIF) a nivel departamental
para impulsar la producción silvopastoril con vocación productiva de madera.
Nicolás Posada, presidente
del Comité Intergremial, agradeció a Fedemaderas por elegir a Medellín y
Antioquia como sede del evento, destacando la importancia de estos esfuerzos
para impulsar el progreso y el desarrollo en la región. Resaltó cómo la bioeconomía,
con su cadena de producción, comercialización y transformación, impacta
positivamente en las regiones, apostando por el desarrollo social y mejorando
la calidad de vida de las familias, a la vez que contrarresta la acción de
grupos criminales.
Una agenda que
promovió la colaboración y la innovación
La I Semana de la Bioeconomía Colombiana incluyó actividades como el III Pre Congreso Nacional de Industriales de la Madera, el I Tour Forestal y de la Madera y el III Congreso Nacional de Industriales de la Madera, buscando fomentar la innovación, la inversión y la colaboración. Entre los temas centrales se abordó la promoción de clústeres regionales de bioeconomía para desarrollar cadenas de valor competitivas y la construcción sostenible con madera como estrategia para reducir el déficit de vivienda y promover edificaciones amigables con el ambiente. Además, se destacó la dendroenergía o biomasa forestal como fuente de energía renovable.
Un hito importante fue la
realización de una macrorrueda de negocios el 28 de mayo de 2025, con la
participación de ProChile, presentando oportunidades para empresas del sector
forestal. También se contó con la coorganización de CAS, una empresa forestal
del Nordeste Antioqueño reconocida por su modelo de manejo sostenible, y se
logró una alianza histórica con la CAR Cundinamarca para proteger los bosques y
promover el uso legal y productivo del recurso forestal.
El evento culminó con un
llamado a la construcción de una ley forestal única, o incluso una ley de
bioeconomía, que promueva la inversión, reduzca la ilegalidad y fortalezca el
desarrollo sostenible del recurso forestal en Colombia. La I Semana de la Bioeconomía
Colombiana en Medellín marca un precedente para la integración de la
sostenibilidad ambiental con el crecimiento económico en el país.