Laura López Alzate
La Facultad de Minas
de la Universidad Nacional de Colombia en su aniversario dio a conocer sus
avances y retos.
La Facultad de Minas, que en abril de 2025 cumplió
138 años de historia, ha sido un pilar en el desarrollo de Colombia, desde sus
aportes en minería y metalurgia en el siglo XIX hasta su papel en el despegue
industrial del siglo XX.
La Facultad, reconocida por su excelencia académica,
creó el primer doctorado en ingeniería del país en 1991, enfocado en recursos
hidráulicos. Actualmente, cuenta con 54 grupos de investigación, muchos de
ellos clasificados en las más altas categorías por Minciencias. Además, el
programa de Ingeniería de Minas de la Facultad es el número uno del país según
el Ranking QS, y el puesto 24 a nivel mundial.
En el contexto de los desafíos actuales como el
cambio climático y los objetivos de desarrollo sostenible, la Facultad de Minas
integra estos temas en sus 12 programas de pregrado y 55 posgrados, así como en
sus proyectos de investigación. La Facultad está desarrollando una agenda
activa con dos centros de pensamiento: "Territorios de Vida",
enfocado en el manejo del agua, cambio climático y desigualdades sociales, y el
"Centro de Pensamiento en Formación y Desarrollo Profesional", que
aborda los retos de la educación superior en Colombia.
No hay que olvidar que en el campus de Robledo en el que su misión académica está inscrita desde la década de los 40, el artista e ingeniero civil Pedro Nel Gómez trazó el legado arquitectónico y estético que la convirtió en patrimonio nacional. En los murales de los bloques M3y M5 perviven las historias al fresco del acercamiento humano a la ciencia y de las luchas sociales de las que somos hijos. La Facultad es un museo de la Universidad Nacional y de Colombia.
La minería sostenible, el gran desafío
La Facultad aborda la minería sostenible desde
diversas perspectivas, incluyendo la formalización de la minería artesanal y la
planeación adecuada. Se encuentra trabajando de cerca con la Dirección Técnica
de Minería de Antioquia para la formalización y distribución del trabajo minero
en el departamento.
La decana de la Facultad, Eva Manotas, enfatiza que
la transición energética también requiere minerales, destacando la necesidad de
explorar las "tierras raras" en Colombia para contribuir a esta
transición. La Facultad promueve una minería responsable con el medio ambiente
y las comunidades, integrando la ingeniería con el diálogo social.
Colaboración interdisciplinaria y compromiso
social
La lentitud en las conversaciones sobre licencias
ambientales y la concentración en la minería a gran escala son barreras que la Facultad
busca superar, proponiendo una asignación más justa de títulos mineros que
incluya a los pequeños mineros bien acompañados técnicamente.
En cuanto a la responsabilidad social, la Facultad
de Minas apuesta por la formalización del ejercicio minero, lo que ha
demostrado reducir los índices de violencia e ilegalidad. Sin embargo, la clave
es un trabajo conjunto y colaborativo con las comunidades, donde la universidad
no impone su conocimiento técnico, sino que escucha y construye soluciones
viables en contexto. Eva subraya la necesidad de equipos interdisciplinarios
que incluyan sociólogos, psicólogos, comunicadores y trabajadores sociales para
propuestas verdaderamente sostenibles.
Respecto a la deforestación, la Universidad trabaja
en alianza con la Facultad de Ciencias Agrarias para la reforestación de
territorios afectados por la minería. En la explotación de hidrocarburos,
grupos de investigación de la facultad lideran metodologías que, a través de la
nanotecnología, buscan mejorar orgánicamente el terreno y promover la vida en
lugar de la deforestación.
La Facultad de Minas también se involucra en
proyectos de extensión solidaria con comunidades, como en los Llanos
Orientales, articulando formación y adaptación ambiental. Adicionalmente,
cuenta con un grupo de investigación y un laboratorio "One Health"
que estudia la evolución y caracterización de virus en el país, especialmente
en Antioquia debido a la alta inmigración, y acompaña a estas personas con
orientación legal y de salud.
La "línea de trabajo transversal" de la Facultad
es el "campo sostenible". Esto se refleja en el uso de energía solar,
el reciclaje de agua, la protección de la fauna y flora, y la colaboración con
entidades como EPM para proteger la vida silvestre de los cables eléctricos.
Además, promueven una política de reducción de plásticos, incentivando el uso
de termos y puntos de recarga de agua.