Valeria
Afanador Cárdenas, una niña de 10 años con síndrome de Down, desapareció el 12
de agosto de 2025 en el Gimnasio Campestre Los Laureles, un colegio ubicado en
la vereda Canelón, sector Rincón de las Viudas, en Cajicá, Cundinamarca, a unos
40 kilómetros al norte de Bogotá. Su desaparición generó una movilización
masiva de autoridades, organismos de socorro y la comunidad, que se mantuvo en
vilo durante 18 días. El viernes 29 de agosto de 2025, el gobernador de
Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de la
menor en una zona contigua al río Frío, cerca del colegio donde fue vista por
última vez. El caso ha conmocionado a Colombia, generando un debate sobre la
seguridad de los menores, la efectividad de los protocolos de búsqueda y las
posibles fallas institucionales.Detalles del hallazgo y la
investigaciónHallazgo del cuerpo:Lugar y fecha: El cuerpo de Valeria fue
encontrado el 29 de agosto de 2025, a unos 300 metros del Gimnasio Campestre
Los Laureles, en una zona rural conocida como Fagua, cerca del río Frío. Según
el gobernador Rey, el cuerpo estaba sumergido en el río, lo que fue confirmado
por los Bomberos de Cundinamarca.
Circunstancias:
Un campesino local alertó a la seguridad privada del municipio, que a su vez
informó a las autoridades, activando el Puesto de Mando Unificado (PMU). El
cuerpo fue identificado como el de Valeria, quien aún llevaba la sudadera de su
uniforme escolar.
Interrogante
clave: Jorge Emilio Rey señaló que el sector donde se encontró el cuerpo había
sido inspeccionado repetidamente desde el inicio de la búsqueda, lo que llevó a
las autoridades a considerar “improbable” que el cuerpo estuviera allí desde el
12 de agosto. Esta declaración refuerza la hipótesis de que el cuerpo pudo
haber sido colocado en el lugar días después, sugiriendo un posible crimen.
Cronología
de la desaparición:12 de agosto de 2025: Valeria fue vista por última vez
alrededor de las 10:30 a.m. en el patio del colegio, jugando cerca de una cerca
viva que colinda con el río Frío. Las cámaras de seguridad del Gimnasio
Campestre Los Laureles captaron a la menor entrando y saliendo de una zona de
arbustos cerca de una reja perimetral, pero no muestran su regreso.
Reporte
inicial: El colegio notificó a los padres, Manuel Afanador y Luisa Cárdenas,
tras el recreo, indicando que no podían encontrar a Valeria y asumiendo
inicialmente que estaba escondida. Las búsquedas internas no dieron resultado,
lo que llevó a la familia a alertar a la Policía y a los medios.
Hipótesis
iniciales: Las autoridades contemplaron que Valeria pudo haber tenido un
accidente en el río Frío o haberse perdido en la zona boscosa. Sin embargo,
tras inspecciones exhaustivas con buzos y drones, los Bomberos de Cundinamarca
descartaron en un 95% la presencia de la menor en el río durante los primeros
días.