María Irma Noreña, quien se desempeñó como gestora social en Pereira, continúa su liderazgo desde la Fundación Amar es Cuidar.
María Irma Noreña, hija de campesinos colombianos, profesional, líder social y política, madre y esposa, ha dedicado los últimos 10 años de su vida a trabajar por las mujeres, los jóvenes, las familias y los animales, construyendo oportunidades y bienestar en sus comunidades.
María Irma Noreña ha dedicado los últimos 10 años de su vida a trabajar por las mujeres, a construir oportunidades y bienestar para las comunidades.
Durante su período como gestora social de Pereira lideró iniciativas que, tras su implementación, hoy son la base de los programa de Equidad de Género: ‘Pereira es Mujer’ y la "App Mujer Segura", así como la gestión de 160 becas de estudios para mujeres, especialmente, aquellas que dejaron de lado sus proyectos de formación académica, acciones que fortalecieron la protección, la educación y el empoderamiento femenino en la ciudad; lo que además le valió la confianza de la representación de comunidades femeninas para que a través suyo se logren espacios más representativos para las causas de mujer y familia en Colombia.
Una fundación que impacta desde el bienestar y el cuidado
Actualmente, María Irma a través de su Fundación ‘Amar es Cuidar’ ha consolidado un trabajo amplio y sostenido: programas de empoderamiento para mujeres y jóvenes, proyectos de bienestar familiar y campañas de cuidado, especialmente, de los animales de compañía, a los que ella cariñosamente les llama “peluditos”.
La Fundación también impulsa jornadas de salud visual para niños, a través de su programa ‘Gafitas’ y atención en salud mental para las mujeres, con proyectos como ‘Sanemos juntas’, ‘Cantemos juntas’ y ‘Leamos juntas’, generando un impacto tangible en los territorios del país y el empoderamiento femenino.
“Estos son proyectos con los que transformamos realidades, promoviendo equidad, bienestar y cuidado por todos los seres que nos rodean. Queremos construir un mundo donde cada mujer, cada joven y cada ‘peludito’ tenga un lugar seguro y lleno de oportunidades”, asegura María Irma.
Es así como ella ha entendido que el liderazgo social puede ser una fuerza de cambio real y constante, combinando protección, educación y amor por la comunidad.
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